A todo buen vino le llega el momento de la cata.

Antes de empezar a beber ese gran vino que llevamos tiempo esperando, es conveniente dejar reposar el tan preciado caldo en un decantador para que se oxigene. A continuación, deberemos servirlo en una copa de cristal fino, preferiblemente sin ningún tipo de grabado. Luego, dejemos que el vino caiga lentamente de la copa y saboreémoslo antes de tragarlo, para apreciar toda su magnitud.

Si va a mantener la botella abierta durante varios días, es importante que el vino no se oxide. Por ello, si dispone de varias botellas abiertas simultáneamente puede guardarlas colocándolas en los dispensadores de vino que incluyen algunos de nuestros modelos de vinotecas Caveduke. Estos dispensadores permiten conservar la botella una vez abierta durante 15 días y servir el vino en las condiciones que este precisa sin mermar su calidad.